Editorial

Aceptación de uno mismo o aceptación incondicional

Muchos de los problemas que tenemos los seres humanos, provienen de las exigencias que nos hacemos día con día para ser mejores, tener un buen trabajo, tener una buena posición económica, tener una buena pareja, tener unos buenos hijos, etc., y eso está bien, sin embargo, cuando algo se dificulta, nos sentimos mal, a veces nos culpamos y hasta nos juzgamos, nosotros solemos ser nuestro peor crítico, nos cuesta trabajo aceptar que los fallos son humanos, y que no somos perfectos.

En la búsqueda de nuestro bienestar, tratamos de estar bien con nuestra pareja, con nuestros hijos, amigos, familia, y ¿no deberíamos empezar por estar bien con uno mismo?

Aceptación de uno mismo o aceptación incondicional, representa que uno se acepte a sí mismo plenamente, así como su existencia, sin requerimientos o limitaciones de ninguna especie y no es lo mismo que la confianza en uno mismo, o amor propio, ya que estas son una forma sumamente condicional de aceptación, debido a que se posee alguna razón específica para ello, a que hace algo bien o con excelencia, por lo que perderá esa confianza o estimación, tan pronto como comience a funcionar deficientemente (Albert Ellis, 1980).

-El primer paso para esta autoaceptación es el perdón, es reconocer que somos humanos que nos equivocamos, que tenemos errores y perdonarnos por ello, y aun así querernos y respetarnos.

-El siguiente paso es la validación de nuestras emociones, y para esto, debemos conocerlas, identificarlas, y aceptarlas, sin prejuicios hacia nosotros mismos.

-Asumir que la vida tiene una dosis de incertidumbre y que al asumir riesgos, podemos fracasar pero que eso es parte de un aprendizaje.

-No te compares con los demás, recordemos que todos somos diferentes y tenemos diferentes habilidades y virtudes.

La aceptación de uno mismo es decirle si a mi vida a lo que soy y a lo que no soy, a mis cualidades y defectos, a mi presencia y ausencia.

“Soy bueno no porque hago las cosas bien o porque soy amado por otros, sino simplemente porque estoy vivo. Mi bondad es mi condición de ser viviente. Nada más” (Albert Ellis, 1975).

Correo: [email protected]

Terapia en línea: http://www.psicologíaonlinemx.xyz/