¿Campañas en plena pandemia?
-Nos ataca otro virus, la guerra electoral y el despilfarro de recursos.
REDACCIÓN
Iniciaría oficialmente la campaña electoral en noviembre, pero en realidad ésta ya inició desde hace mucho, así se dejan ver las acciones que los gobernantes y legisladores realizan bajo pretexto de servicio a la ciudadanía mediante una deteriorada bandera llamada democracia.
Así lo reflejan los últimos informes cargados de “jiribilla” electoral donde los gastos en publicidad son desmedidos, sobre todo, en estos momentos donde la pandemia por Coronavirus se mantiene en una etapa decisiva y peligrosa de contagios y peligra el futuro, no sólo en el rubro de la salud, sino en lo económico.
La ambición por el poder deja atrás -como siempre- lo verdaderamente importante, que es el bienestar de la ciudadanía.
La misma pandemia por Covid-19 de manera inaudita, sirve a los politiqueros para proyectarse como los benefactores de una sociedad que para ellos y según su manera inescrupulosa de pensar, es la plataforma de lanzamiento a sus aspiraciones personales.
En Querétaro lo presenciamos todos los días, y así claro ejemplo es Roberto Sosa edil de Corregidora quien no esconde sus pretensiones y ya ha señalado su interés por repetir en el cargo otros tres años, por lo que se deja ver en fotos repartidas a los medios, entregando despensas a la población, como si los programas auspiciados por el gobierno del estado con los mismos fines de apoyo a los gobiernos municipales panistas y sus legisladores sólo llevaran la romántica intención de apoyo para la población, y no el verdadero fin de mantener el poder partidista Son apoyos igual municipales, que parecieran son un acto de benevolencia gubernamental y no una obligación, acciones obligadas en una responsabilidad pública y que para ello los gobernantes, fueron elegidos como administradores al servicio de la gente. Son miles e incluso millones de pesos los que se gastan en publicidad los gobiernos, dinero que se podría redireccionar a resolver necesidades más importantes como la creación de escuelas, becas, salud, etcétera.
No obstante, la ambición desmedida por el poder se desborda y los gastos de promoción, son sustentados injustamente e ilegalmente, por el mismo presupuesto administrativo derivado de nuestros impuestos.
Otro claro ejemplo del derroche que se hace con dinero del erario, utilizado so pretexto de informar, y donde los gobernantes aprovechan esta responsabilidad anual, para promocionarse como es el caso del Edil -también panista- Luis Bernardo Nava que en espectaculares ha destacado su sonrisa fingida. Por ello, el Presidente en Querétaro del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Paul Ospital Carrera, afirmó que se solicitó a la Unidad de Transparencia del Municipio, el detalle del gasto en materia de publicidad que usó el edil en la difusión de su segundo informe, además que presentó una queja ante el Instituto Electoral del Estado de Querétaro, referente a los espectaculares con la imagen del edil, que dijo, no informan realmente de las obras y acciones del gobierno municipal. Obviamente, esto no va a trascender ya que estos gastos son simulados por la administración y muchas veces auspiciados por la misma corrupción en los llamados institutos electorales.
Sin embargo, el PRI Estatal presentó ante el Instituto Electoral del Estado de Querétaro la denuncia por actos anticipados de campaña en contra del alcalde Luis Bernardo Nava Guerrero, quien gastó millones de pesos, de recursos públicos, del predial, para favorecer su imagen; y también en contra del PAN porque tiene que vigilar el actuar de sus militantes, los del PRI no se muerden la lengua ya que todos sabemos los priistas siempre han hecho lo mismo, no obstante Luis Nava no informó nada y aprovecho los recursos públicos para promover su imagen personal y mientras que las calles estuvieron repletas de su sonrisa y de su nombre, espectaculares, anuncios en las paradas del camión y en redes sociales, pero sin ninguna información gubernamental en dos años de gestión municipal.
En Pedro Escobedo, sucede lo mismo, y sin nada de escrúpulos o vergüenza, el edil Amarildo Bárcenas se puso a entregar a los ciudadanos, su poco interesante y austero informe de pocas acciones y grandes mentiras, casa por casa, pero además aprovechó la coyuntura, para regalar una gama de artículos electorales (esto antes los panistas lo criticaban tanto) al señor Bárcenas se le vio repartiendo bolsas, mandiles, gorras y sombrillas con los colores del PAN. También hace algunos días y en espectaculares dentro de la ciudad capital, pudimos observar también espectaculares del senador y posible contendiente por la gubernatura, el morenista Juan José Jiménez quien dio a conocer que ya fue notificado de una denuncia en su contra por promoción anticipada, acción que el morenista calificó como golpeteo político, ya que aseguró, fue la revista que lo había entrevistado quien puso el espectacular.
A otro personaje de la política en el estado que se le ja acusado, por parte de los panistas (El que este libre de pecado…) por supuestos actos de publicidad política es Arturo Maximiliano García quien ni siquiera ha señalado un interés por contender pata algún cargo, sin embargo, el especialista en economía, quien tiene un programa de radio, fue absuelto de estas acusaciones ya que el espectacular en el que aparece es publicidad del medio informativo y no de él.
En fin, el despilfarro de recursos gubernamentales ya inició y aunque todos los presidentes municipales del estado se han beneficiado con los informes para promocionar su imagen y la de su partido, los ediles más señalados por esa razón y se puede decir más descarados, son Roberto Sosa (Corregidora); Amarildo Bárcenas (Pedro Escobedo); Rosendo Anaya (Amealco); Luis Bernardo Nava (Querétaro); Enrique Vega Carriles (El Marqués); Guillermo Vega (San Juan del Río) y Antonio Mejía de Tequisquiapan. Y no se diga de los legisladores queretanos que hacen alarde de levantar más el dedo y aparecer en medios como es Mauricio Kuri, Felipe Fernando Macías, Elsa Méndez, y Guadalupe Murguía.
En fin el despilfarro ya inició y la guerra electoral se manifiesta en cada acto de quienes legislan y gobiernan. Ante la poca honestidad política, esta la poca credibilidad que tenemos los ciudadanos por tales personajes. Es nuestra decisión seguir así o cambiar…Como siempre, Usted Querido Lector tiene la mejor opinión.