Querétaro

Ni una más

-Una mujer o niña es asesinada por alguien de su propia familia cada 11 minutos.

Esta semana Querétaro enmudeció con la triste noticia de que una mujer de apenas 17 años de edad había perdido la vida a manos de quien fuera su pareja sentimental, un universitario de tan sólo 22 años. Más allá de lo brutal del acto y de que hayan podido detener al presunto feminicida, debemos tener claro que para la familia de la víctima, la vida ya no será igual. Espero que encuentren pronta resignación y la fuerza para poder salir de este momento.

No cabe duda que estamos viviendo tiempos difíciles, que hay motivos para sentir en ocasiones que somos consumidos por la vorágine de la sociedad actual y del apabullante bombardeo de los medios de comunicación, en particular de las redes sociales, sin embargo, nada justifica lo que Luis Fer “G” le hizo a una mujer que apenas comenzaba su vida.

El feminicidio, también conocido como femicidio, es la forma más extrema de violencia de género y se define como el «asesinato intencional de mujeres por ser mujeres».

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) los feminicidios son cometidos principalmente por parejas o ex parejas que pueden comenzar con violencia psicológica, económica, física y sexual y que culminan con la muerte de la mujer.

Según la ONU, alrededor de 47 mil mujeres y niñas en todo el mundo fueron asesinadas en 2020 por sus parejas íntimas u otros miembros de la familia. Esto quiere decir que en promedio una mujer o niña es asesinada por alguien de su propia familia cada 11 minutos.

Las cifras son escalofriantes, los hechos más, pero más allá de las estadísticas debemos preguntarnos como sociedad ¿Qué estamos haciendo para evitarlo? ¿Por qué alguien que proviene de una mujer es capaz de algo así? Tal vez nunca habrá las suficientes respuestas para estas preguntas.

Todos somos parte del problema, así también debemos ser parte de la solución. Eduquemos a nuestras hijas e hijos con amor, con valores y haciéndoles saber lo valioso de la vida de cualquiera.

No podemos cerrar los ojos y querer aparentar que eso no sucederá con nuestras mujeres que son hijas, hermanas, esposas, amigas, que son las creadoras de vida. No basta el discurso y debemos pasar a los hechos positivos para dar a las nuevas generaciones un aliento de amor y respeto por lo más maravilloso para la vida: las mujeres.

 

Fidel Favela Vega