Editorial

¡Pon valor a tu vida!: El NO, ya lo tienes

Andrea Borjas

Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo. Ni siquiera yo, ¿vale? Si tienes un sueño, tienes que protegerlo.
Las personas que no son capaces de hacer algo te dirán que tú tampoco puedes.
Si sueñas algo,¡ realízalo y punto!»
(Película: En busca de la felicidad).

El NO, ya lo tienes. ¡Siempre, siempre, siempre, ve por el SÍ!
Estimado lector, la semana pasada, te hablé de la pérdida, del duelo y en qué lo convertimos con la forma en la que elegimos tomarlo. Hoy quiero hacerte reflexionar algo que va asociado a la pérdida de algo en tu vida, ¿eres de los que siempre piensan en negativo cuando en lugar de preguntarte, ¿Qué es lo PEOR que puede pasar?, mejor comienzas a cambiar el chip y te dices a ti mismo, ¿qué es lo MEJOR que me puede pasar? Acostúmbrate a pensar en positivo.
Había dos palabras que me molestaban y me estaban taladrando toda esta semana en mi cabeza y corazón: MIEDO Y TEMOR. Los que me conocen, las personas que realmente me conocen, dirán que yo no tengo miedos internos, que siempre me digo y les digo “Hazlo, si tienes miedo o temores, hazlo de todas formas el NO, ya lo tienes, ve por el sí”. Y esta palabrita, “miedo”, me estaba taladrando en mi cabeza y corazón porque me cuestioné: -¿Fue miedo Andrea?, ¿fue miedo lo que hizo que te olvidaras de ti misma, miedo al éxito, miedo al fracaso, miedo a que? ¿Qué fue Andrea, lo que te paralizó ante cada oportunidad o situación, por qué no saliste adelante, por qué no te impulsaste tú misma a lograr y luchar por lo que tú querías? No quiero extenderme mucho, porque debo respetar el espacio en este periódico de los demás, y por supuesto si quieres saber más te invito a llamarme o escribirme. Pero, afortunadamente para mí, Dios hace dos años puso en mi camino un maestro de vida en el cual hemos crecido y aprendido de cada uno. El cual me dijo: -Te voy a contar dos historias, la primera es, “La excusa del corredor de Futbol Americano”. Este, cuando recibe el balón y comienza a correr con todas sus fuerzas hacia la meta y casi llega, pero él siente que lo están alcanzando, finge un calambre a la pierna y los demás lo alcanzan, él para sus adentros piensa, los que me vieron, se dieron cuenta del calambre, por lo tanto no me pueden culpar porque no llegué a la meta, él mismo se bloquea para no ser un ganador”. La segunda historia es, “La historia de un caballo pura sangre que fue enseñado a ser un perdedor”. Siempre en las carreras lo frenaban o sujetaban para que los demás ganaran, él en su corazón y espíritu aprendió a ser un perdedor hasta que alguien lo vio y le enseñó a ser un ganador, éste le soltó la rienda para que sintiera que no había obstáculos para que él corriera y viera todo lo que tenía en sí. Platicando con este maestro de vida, me di cuenta que efectivamente, YO MISMA TOMÉ LA DECISIÓN DE FRENARME AL DEJAR Y PERMITIR QUE OTROS (primero, mi papá cuando era niña, al consecuentarme que yo no fuera constante y llegara hasta el final en clases extra curriculares, en la escuela, porque me permitía abandonarlas cuando yo quería, y segundo mi ex esposo cuando me decía: “No te van a dar ese trabajo”, cuando trataba de buscar trabajo, “no lo vas a conseguir” cuando trataba de conseguir una beca para alguna maestría, “no tienes experiencia”, etc, etc, etc), permití que me bloquearan antes de comenzar algo. Me di cuenta por fin que no es miedo ni temor, era inseguridad a lograr lo que yo deseaba. Siempre necesitamos que algo o alguien nos impulsen hasta que aprendas hacerlo por ti misma (o). Por eso, si tienes en alguna oportunidad puedes ayudarme en conseguir una beca para alguna maestría, dar clases o ser orientadora emocional en alguna escuela, dar cursos a maestros o empresas, de antemano te agradezco. “Pedid y se os dará, buscad y encontrareis, todo el que pide recibe, el que llama se le abre…” Mat 7, 7-8)
Reflexiona:
¿Qué sucedería si cada día de tu vida dieras pequeños pasos para lograr ese gran propósito que deseas? Recuerda no es suerte, cuando se juntan la oportunidad y la preparación; cuando llegue esa oportunidad la tomarás. Eso no es suerte, fue tu esfuerzo diario. No te desanimes y no pierdas el objetivo, al final tendrás éxito.
Con cariño Andi.

Licenciada en Seguridad Pública Céd. Prof. 09253689
Especialista en formador de vida emocional. Asesor de aprendizaje virtual y Cuentacuentos.
Cel. 442 149 63 60. electrónico: [email protected]
https://neadorotea.wixsite.com/andreaborjas