Editorial

¿Qué áreas cerebrales se activan con el deporte?

Una de las regiones cerebrales más beneficiadas por el ejercicio es el hipocampo, situado en el lóbulo temporal y asociado a la memoria, la orientación espacial y la regulación emocional. Es una de las dos únicas zonas del cerebro adulto en las que hay neurogénesis (nacimiento de nuevas neuronas) y esta se incrementa cuando nos mantenemos activos físicamente. Dicha neurogénesis aumenta nuestra sensación de bienestar, las capacidades cognitivas y la salud mental.
El hipocampo es la región encargada de “desactivar” el circuito cerebral que nos produce estrés. Ante un estímulo estresante el hipotálamo segrega hormonas, que a su vez activan la glándula pituitaria haciendo que la corteza adrenal libere glucocorticoides (las “hormonas del estrés”, el conocido cortisol). Si este estímulo estresante no desapareciese, como se daría en aquellas personas que sufren estrés crónico, la sensibilidad del sistema se vería alterada, liberándose más cortisol que terminaría por dañar las neuronas hipocampales y evitaría la neurogénesis. Haciendo ejercicio, nos aseguramos un hipocampo sano, con capacidad de regenerarse y que regulará correctamente los niveles de cortisol.
Aunque existe el mito de que el cerebro es un órgano relacionado básicamente con lo intelectual lo cierto es que esto no es así. Tiene que ver, y mucho, con el deporte y el movimiento de los músculos, hasta el punto en el que el cerebro del deportista tiene unas características diferentes. A través del deporte cualquier persona es capaz de cambiar su órgano de la mente y, por consiguiente, su manera de ver el mundo. El deporte nos mantiene ocupados y aporta una gran cantidad de estímulos, y por el otro, hace que el cerebro se adapte y que se entrene para volverse flexible para afrontar diversos retos.
En la anatomía del sistema nervioso, eso significa que las neuronas del cerebro de alguien que practica deporte han sido enseñadas a relacionarse más entre sí, lo cual hace que en el futuro este órgano tenga más “rutas mentales” entre las que elegir, porque ya las ha recorrido en el pasado.
La característica más básica del cerebro de la persona que practica deporte moderado de manera habitual es que se encuentra en un muy buen estado de salud. ¿Por qué? porque vive con un menor nivel de estrés. Esto es muy importante, teniendo en cuenta que un nivel alto de estrés mantenido durante mucho tiempo hace que nuestro sistema inmune trabaje peor. Los múltiples beneficios de esta activación cerebral son que ayuda a: Mejorar la concentración, agilidad mental, la imaginación, la propiocepción, la atención, la coordinación, la motivación, aumenta la autoestima, disminuye el estrés y evita la depresión.
En concreto, el deporte practicado de manera habitual es una maravillosa herramienta para hacer que nuestro sistema nervioso lo tenga más fácil a la hora de evitar excusas y distracciones que puedan apartarnos de nuestros objetivos a medio y largo plazo.

Maestra en Ciencia y Tecnología de los Alimentos, Licenciada en Nutrición y Mesoterapéuta Estético Certificada.
María Eugenia Albarrán Cornejo. Ced. Prof. 5353534
José Siurob #43 col. Mercurio. Tel. 4421249988