Editorial

El Querétaro de cuello blanco

Esta semana la elite queretana, la política estatal y nacional cimbró, tembló y sudó la gota gorda con la detención de Juan Collado, el abogado del expresidente Enrique Peña Nieto, Romero Deschamps, Salinas, entre muchos otros, socio y dueño de Libertad Servicios Financieros (antes Caja Libertad), amigo y socio de muchos que viven de la política en el estado, en fin, fue detenido por lavado de dinero, tras supuestamente haber vendido un predio en Centro Sur, ni más ni menos que en Querétaro, y en la denuncia filtrada de manera muy sospechosa a la prensa, destapaba nombres de funcionarios y exfuncionarios queretanos, entre ellos el Gobernador del estado, Francisco Domínguez Servién, o Nuestro Senador de la República, Mauricio Kuri, el exgobernador Calzada, el hoy Diputado Hugo Cabrera o su paisano colonense Alejandro Arteaga Cabrera, en fin muchísimos más de la crema y nata de la político-queretana. En su declaración, Hugo Bustamante Figuera afirmó que la empresa Libertad Servicios Financieros apoyo y financió las campañas políticas de varios de los antes mencionados.

Los involucrados, TODOS, argumentan y desconocen categóricamente tal situación. El Gobernador Francisco Domínguez, afirmó haber sido víctima de extorsión para que “bajaran” su nombre de la denuncia, incluso demandará por daños al denunciante, mencionó que, no dejará que ensucien su nombre y que se va a defender. “[…] y voy a ir con todo”. Además, dijo que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, no está detrás de los señalamientos. Lo mismo otro de los involucrados, Mauricio Kuri, quién trabajó para la empresa, pero niega estas acusaciones, afirmando que es una falta de respeto y que carecen de fundamento tales acusaciones, a las cuales les ve un tinte político. Lo que nosotros como ciudadanos de a pie (como nos dicen) queremos que se dé certeza sobre quién nos gobierna, queremos que el caso se aclare, y si son o no calumnias, que se nos diga con certeza. Los queretanos debemos y merecemos políticos limpios y honestos, que sea lo que sea, pero que se aclare.

Turismo delincuencial.
Tal pareciera que ¡sí!, en Querétaro vienen de vacaciones a delinquir. Basta con ver cuántos foráneos son los que capturan en cada robo, asalto o lo que usted me diga, esto no deja fuera el nuevo atractivo turístico que tenemos en estos días, me refiero al regreso de los boqueteros y los talacheros, ya que, esta semana volvieron a pegarle a la capital de la paz…

¿El número de muertos por arma de fuego y ejecuciones van en aumento? ¿o sólo es lo que pensamos en esta H. redacción? La semana que entra les decimos.