Editorial

LA MAGÍA DEL PODER

Por: Javier López Velarde Luna

Mientras que el nuevo Dictador del Mundo sigue amenazando comercialmente a países que comparten lazos con Estados Unidos. Y después que este dictador de copete prominente amenaza a México no sólo con un muro,  sino también ahora, con imponer aranceles a productos de nuestro país. Nuestro Gobierno sigue guardando prudencia y a través del diálogo mantiene una negociación al parecer inservible y  por medio de “ceder” ante las imposiciones “gringas” poder llegar  a un común acuerdo bilateral para que no procedan estos impuestos de castigo.

Estados Unidos pide a México sea el tercer país más seguro, y se optimice el control en cuanto a la migración sudamericana.  Esto ha provocado que el Gobierno Mexicano destine seis mil elementos militares a la frontera Sur con el fin de contener la ola de migrantes que siguen traspasando la frontera e invadiendo nuestro territorio en paso a los Estados Unidos.

Sin embargo, se esperan más “delicadezas” por parte del Mandatario vecino incomodo del Norte. Simplemente, existe ya  un miedo arraigado por parte de nuestros conciudadanos mexicanos en cuanto a los que viven en los United States de que los pisen y rechacen sin importar su condición legal, al igual de quienes  se atreven a visitar  a ese país.

Hace unos días una persona de la tercera edad muy cercana a quien escribe este texto, pretendió ir a visitar a un familiar enfermo a la Ciudad de Nueva York y saliendo del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro, llegó  en escala— por medio de Aeroméxico— a la Ciudad de Atlanta, y ahí fue detenida por no contar con el boleto de regreso y por no poder confirmar ante el agente de migración gringo, el dinero que llevaba en tarjeta de crédito. Para empezar este dizque agente, de manera prepotente no dejaba que hablara nuestra compatriota agredida quien por cierto, con trato poco digno, tuvo que soportar el manejo “nacista” de la situación por parte de estos llamados agentes migratorios.

La  visitante mexicana de la tercera edad  fue despojada de su celular y sin poder siquiera hablar (no le dejaban siquiera pronunciar algo) fue acusada de ir a trabajar a ese país, y de esta forma, tratado como delincuente la separaron a un cuarto donde sin alimento, fue sujeta a tortura mental, todo ello  a pesar que manifestó su enfermedad diabética, sólo le proporcionaron un vaso de agua.

 Los indignantes agentes migratorios cual Nazis extremistas, hablaron todo el tiempo mal de nuestro país e insultaban a diestra y siniestra nuestras costumbres y en fin nuestra idiosincrasia.  Al final de cuentas terminaron con quitarle la visa a la visitante mexicana y de mala gana la enviaron después de unas horas a México nuevamente.

 En el transcurso de que estuvo aislada en un cuarto, la persona que hacía el aseo en el aeropuerto, le comentó que para estos agentes es un logro quitar las Visas que más puedan porque reciben un incentivo monetario por parte del Gobierno, esto ya que, dijo,  tienen impuesta una cuota para quitar visas. La Mexicana que padeció esta situación confirmó este hecho, al describir la expresión del agente al quitarle la visa y enseñarla a los otros nazis con tal desfachatez… “Otra Más” les dijo.

No obstante, a estas vejaciones y humillaciones que padecen nuestros paisanos que por alguna razón tienen que visitar a este país vecino en el norte y a los que por necesidad o decisión están radicando allá, nuestro Gobierno tembloroso afirma que es necesaria la hermandad con el pueblo Norteamericano, a lo que estoy completamente de acuerdo, el pueblo de Norteamérica nada tiene que ver con el dictador Kukuxclasista y líder hitleriano Donald Trump y simplemente, los mexicanos esperamos que nuestro Presidente se solidarice con nuestros connacionales y por fin también responda con mano dura a las sanciones de este “loco” que puede llevar al mundo a una catástrofe. Don Andrés Manuel deje por favor a un lado la suavidad y el temor ante un personaje que seguramente pasara a la historia como un dictador más que se cree dueño del mundo, respóndale con decisión ya que lo respaldamos millones de mexicanos orgullosos de nuestra raza y de nuestro país, Si nos imponen aranceles pues también imponga aranceles a sus productos. Consumamos lo hecho en México y Busquemos otros mercados más equitativos y humanos. Ya basta de consentir a un loco.